Juego de niños

"Los locos y los niños siempre dicen la verdad, por eso a los locos los encierran y a los niños los educan" -Anonimo.

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Postal extraña de una típica tarde de sábado:

Ahí estábamos, mi viejo, mi cuñado y yo tomando mate en la puerta de casa, viendo como se juntaban en la vereda unos chicos del barrio para armar un picado. Se divertían, hacían chistes, hasta que cayo uno que, por la charla, dedujimos que se llamaba Julian.

"Che Julian, y la pelota?" le preguntaron. "Pensé que la traia Ruben," respondió el susodicho. "No, nabo, te tocaba a vos hoy. Anda a tu casa a buscarla," retruca el tal Roberto. "Noo, imposible..." decía Julian meneado la cabeza, "la vieja esta durmiendo la siesta y si la despierto entrando a la casa me mata... apenas pude escaparme sin que me oiga y vos querés que vuelva?!".

Se palpaba en el aire que la situación se volvía tensa. Acusaciones varias volaban por el aire. Que yo te dije a vos, que no me dijiste nada, que te deje un mensaje en el celular, que ese es el de mi viejo porque yo obviamente que no tengo, que quien vive mas cerca, que...

"Momento muchachos," se oyó la voz segura de uno de los chicos. Se llamaba Carlitos, y parecía mas grande que los otros. "Porque no jugamos sin pelota".

"Que?!" le dijeron los otros al unisono. "Si, si, juguemos sin pelota. Si los grades de la primera lo hacen todo el tiempo"

"A ver, y como se juega 'sin pelota'?" le dijo Ruben.

"Y, es fácil," Carlitos hablaba con aires de seguridad, como quien tiene el mundo absolutamente descifrado y controlado, "mira, párense ustedes tres ahí" decía mientras indicaba a tres de los mas chicos donde ponerse. "Bien, bien, ahi. Bueno, ahora ustedes dos," continuo, señalando a Julian y Ruben, "párense enfrente. Así, si, justo... bueno, ahora ustedes dos corran mucho, y ustedes tres los persiguen, pero siempre dejando uno libre para el relevo."

"Perdón Carlitos," preguntaron dos chicos que habían sido dejados de lado, "y nosotros que?"
Carlitos los miro y les dijo "Bueno, corran también," "Y por donde corremos?" le retrucaron. "Y, que se yo, por ahí... corran mucho y que los persigan. Pero traten de que no los agarren, y traten de ser ordenados."

"ahhh," le dijeron los dos, "estamos jugando a la mancha entonces?"

Carlitos los miro con aires de frustración "No, imbécil. Estamos jugando al fútbol"

"Pero si no hay pelota?"

"Ayyy, si seras chiquilin," le respondio un Carlitos cada vez mas exasperado, "esto es futbol sin pelota. Como juegan los grandes. Hay que correr para que el otro no te alcance, o para marcarlo. Ves? Como están haciendo ellos," le dijo, indicando al grupete de chicos que se estaban persiguiendo entre zancadillas y empujones. "Ves, así... que no te agarren porque si te agarran te parten."

"Y porque te parten?"

"Porque quieren recuperar la pelota"

"Pero si no hay pelota?"

"Pero en un partido de verdad si hay pelota"

"ahhh, entonces esto no es de verdad?"

"Si, si que es de verdad. Así juegan los grandes, o nunca viste el futbol en la tele?"

"Si... y por lo general hay una pelota"

"Si, una pelota que lo unico que hace es estorbar, o porque te crees que la tiran para adelante? Para poder correr sin que los estorbe, para eso, vende humo infame" proseguia Carlitos, agarrando una botellita de gatorade para calmar su sed de asesinarlos

"A mi me parece que esto es jugar a las escondidas, pero con patadas," prosiguio el otro

"No, no y no! Es futbol, de verdad, y como juegan los grandes, como Schiavi."

"Bueno, que se yo... a mi me parece aburrido... me voy a estudiar para la prueba de matematica del martes... divertite jugando al maratonista. Chau!"

Y asi fue como nos quedamos, atonitos, mi viejo, mi cuñado y yo, tomando mate en la puerta de casa, viendo como se juntaban en la vereda unos chicos del barrio que se preparaban para ir a probarse a Banfield.